Un girasol que estaba en un prado, rodeado de hermosas flores: rosas, margaritas, pompones, orquídeas de exóticas variedades y colores. Del verde y colorido campo el viento esparcía agradables aromas. Mientras las otras flores abrían sus pétalos y danzaban sus hojas juguetonas con el viento, el Girasol sentía que no era tan admirado como las rosas rojas o un amarillo clavel.
Cierta mañana, una pequeña abeja que hacía su visita matutina a las flores para recolectar su polen se enteró del estado de ánimo en que se encontraba el Girasol.
Fue entonces que la abejita se acercó a él con voz suave y dulce:
—¿Qué tienes amigo? ¿Por qué ya no extiendes tus pétalos?, te veo muy decaído y cabizbajo. Me han contado mis amigas las rosas y margaritas que ya no danzas al sol, que te pasas las noches y los días con tu tallo mirando al suelo; ¿puedo saber el motivo de tu tristeza? —le preguntó.
—Me siento un gigante delante de las demás flores, observo la admiración que le tienen a las rosas y si de llevarse a alguien de este verde prado prefieren a mis amigas las rosas o a las orquídeas, creo que es porque soy muy grande para las pretensiones de los humanos —contestó tristemente el Girasol.
—No digas esas cosas, yo que he ido revoloteando por muchos prados y praderas te voy a mostrar algo: contempla los espejuelos de agua que están al pie de tu tallo, observa y analiza tu forma, tu color, tus pétalos. Mira que tu parecido es semejante al sol, por eso tu nombre es en honor a ese gran astro porque solo tú eres el valiente capaz de verle el rostro todo el día; giras en torno suyo. Y para aliviar tu sentir te tengo una buena noticia: ¡hoy tendrás una visita real! —aseveró la abejita entusiastamente.
—¿Una visita real? —preguntó el Girasol sorprendido.
—¡Sí! Hoy vendrá la abeja reina quien nunca abandona su trono, escuchó de tu aflicción y por eso ella te explicará lo importante que tú eres para el campo, para los hogares, en la vida de los humanos, lo que significas y representas; porque simbolizas amor, admiración, entre muchas cualidades más. Y eso no es todo, tienes más familiares girasoles.
»¿Sabías que, de tus semillas se extrae un aceite finísimo muy apetecido por sus propiedades para la salud? También tu tallo es importante en la ganadería cuando la hierba es escasa pues se utiliza para el ganado. ¿Ves? No eres una simple flor, eres muy apreciada. Para nosotras, tu polen es indispensable. Has sido premiado con tantas bondades por la naturaleza que no tienes razón para sentirte solo o menos.
—¡Ah, ya entiendo todo! Desde ya me prepararé para recibir a la visita real; mientras tanto, hagamos una ronda al sol —felizmente contestó el Girasol.
Nunca llegó la abeja reina; todos los cultivos de flores, incluyendo los grandes girasoles, fueron fumigados con un veneno esparcido por el hombre.
Linfo cuento para ayudar a subir la autoestina a nuestros niños y tambien para concientizar al hombre del daño que hacen los pesticidas a la naturaleza; las abejas juegan un papel fundamental en nuestras vidas al punto que si desaparecen en poco tiempo es posible que la humanidad desaparezca tambien con ellas…felicitaciones por ese escrito.
Amiga ALICIA LÓPEZ. Felicitaciones por la publicación de éste bello cuento que invita al reconocimiento de los valores de cada uno, que puestos al servicio de la humanidad construimos y aportamos al mejoramiento mundial y además la necesidad de toma de conciencia.Un fuerte abrazo.?☘️?☀️???️?️✒️???
Qué linda historia, querida Alicia. Hay personas que no se dan cuenta de todas las virtudes que tienen y de cuán valiosos son para los demás, que su ´paso por esta vida va iluminando la de muchos: inspirándolos, siempre para más y para mejor. ¡Felicitaciones!
Estimada Alicia: Cuando leí este maravilloso cuento del girasol, abrí el corazón a la niña que llevo por dentro. Muy emocionante leer tu composicion literaria y más el mensaje que deja.
Un fuerte abrazo de luz ???
Una linda historia Alicia ? ? un abrazo ?
Gracias por leerme.