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LAACHON

Juan Manuel Gómez Cotes

Durante una calurosa mañana en las sabanas de Ishamana, Irama pastorea los chivos de la familia. Es un adolescente wayuu, encargado del cuidado diario de los animales. Inicia a las primeras horas de la mañana, cuando el ganado caprino sale del corral, hasta el atardecer que es el momento de regresar a casa. Es una responsabilidad que tiene desde niño, asignada por su padre. El progenitor cree que así madurará, y podrá aprender las actividades que deben realizar los Wayuu para sobrevivir en estas cálidas pampas.

Cuando Ka´i alcanza su plenitud, Irama aprovecha las sombras de un frondoso trupillo para descansar y comer la sandía que su madre le había dado como provisión para el almuerzo. Luego de saciar el apetito, espera que transcurra la tarde, recostado sobre el tallo del árbol. Llevará los chivos hacia la laguna, que él llama cariñosamente Laachon. Mientras aguarda, piensa en la hermosa sensación de darse un baño en esas aguas que calman la sed a todos. La ruta es larga para poder abastecerse de esa pequeña fuente de agua.

El territorio de los wayuu, se caracteriza por presentar escasez del líquido vital y cualquier laguna que exista es un paraíso en medio de tanta sequedad. Los ranchos se encuentran dispersos unos de otros, pero siempre tratan de construirlos cerca de las fuentes de agua. El agua representa la unión de las familias, su ausencia representa miedo, hace presencia en los mensajes de Lapü y en los rituales, ella es la vida misma.

Laachon vive por las bendiciones de Juya, padre Lluvia quien brinda el preciado líquido, guardado en múcuras. Los alimentos que se preparan con él facilitan la vida en estas planicies calientes. Para liberarlo del poder maligno de Wanülüü, los ancestros usaban paños para filtrarla, la dejaban en reposo o con la pulpa de Yosu apartaban el agua que no se pudiera beber, así se prevenían las enfermedades del estómago y la piel. 

Durante su recorrido, Irama recuerda lo que dijo su abuela Carmen, la noche anterior durante la cena: Juya los está castigando por los daños que los wayuu les están haciendo a los animales y plantas al no respetarlos porque se dedican a cazarlos y talarlos solo por dinero, los alijuna también les están causando perjuicios debido a que están contaminando las lagunas y hojas de los árboles. Ellos le extraen carne a Mma de sus entrañas en ese lugar que ellos llaman Cerrejón. Esa carne negra, ya profanada, la llevan en un tren que riega rastros de ella, siendo una maldición para las fuentes de agua y plantas que se ubican al lado de la vía férrea. La abuela decía que Juya ha dejado de derramar las bendiciones y la última de ellas, Laachon, no demorará muchas lunas en secarse por los fuertes rayos de Ka´i.

Cuando el joven llega a la laguna se encuentra con otras personas de la comunidad, quienes iban a lavar ropa y bañarse, pero han decidido regresar, otras llevan en sus recipientes el ahora amarillento líquido. La anciana tenía razón: Laachon y las demás fuentes de agua se están acabando, y la poca que queda en la superficie solo puede provocar que la gente se enferme de diarrea y brotes en la piel.  

Al darse cuenta de la poca profundidad de Laachon, Irama se resigna a asearse su cuerpo con paños como acostumbra hacerlo cuando cuentan con poquita agua durante la época en que Joutai invade sus viviendas con la arena del desierto. Todos limitarán cualquier actividad que demande gastar mucha agua. Para las próximas lunas, la sed de los chivos deberá saciarse con la pulpa de Yosu para que no se mueran por culpa de Wanülüü. 

Es seguro que su padre le pida ayuda para excavar un pozo en las arenas y así conseguir agua dulce. Irama extrañará bañarse tres veces al día. El adolescente solo espera que los wayuu y los alijuna dejen de comportarse mal con las plantas y animales para que Juya no los castigue más.   


Glosario:

Alijuna: Término que usan los wayuu para referirse a los que no son de su cultura, sinónimo de extraño.

Joutai: Viento fuerte en periodos de sequía.

Ka´i: Sol.

Lapü: El sueño.

Mma: Madre Tierra

Wanülüü: Entidad maligna asociada a la sequía y las enfermedades.  

Yosu: Cardón, cuya pulpa sirve de alimento en periodos de sequía.

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6 comentarios en «Laachon»

    1. Juan Manuel, me encanta que te apasione lo tuyo. Soy alijuna pero siempre me ha encantado conocer sobre esta cultura que tiene mucho para mostrar. Felicitaciones! Excelente relato

  1. JUAN MANUEL GÓMEZ muy buenos días. Felicitaciones por éste relato muy bien estructurado que ilustra un panorama oscuro por la escasez del recurso hídrico, el daño que la industria le ocasiona al planeta y a sus comunidades ancestrales que son un gran patrimonio de la humanidad. Una producción escritural valiosa que invita a la toma de conciencia sobre la importancia de los recursos naturales para esta y las futuras generaciones. Muchas gracias por compartir el glosario de la terminología de la lengua Wuayuu para facilitar la comprensión del texto y conocer un poco más su cultura. ????????️?️✒️✨?

  2. Estimado escritor wayuu, sus escritos siempre me hacen reflexionar y este no ha sido la excepción. Cuánto daño al planeta le hemos hecho, porque, según el humano, primero estamos nosotros, luego nosotros y al último nosotros, pensamiento y acciones egoístas. Gracias por compartirnos sus enseñanzas a través de sus relatos. FELICITACIONES.

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