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SEÑORA COLOMBIA

Ignacio Gutierrez Aragón

 

Cómo se llora el silencio…

¿Cómo se llora el silencio de los ojos cansados?,

¿cómo se dibujan los años

cuando pasan los años

y se muestran distintos

joven y anciano?

 

¿Quién delinea el sufrimiento de los rostros cansados

que los mata el tiempo?,

¿quién dibuja lentamente el temblor de las manos

y le pone color a la voz del anciano?

 

Se nos pasa el tiempo y ni cuenta nos damos,

tenemos salud y buscamos dinero,

en el afán olvidamos de dar un abrazo, de decir te amo,

de agradecer a Dios por tantos regalos

y después lloramos.

 

Tenemos dinero con que pagarle al médico

que nos cure el cáncer

que en nuestro cuerpo llevamos,

¿cómo se llora el silencio

cuando ya no podemos dar el abrazo

a los que tanto amamos?

 

 

Quiero fundirme en ti…

Quiero andar por tus caminos

sintiendo tus espinas en mis pies,

sintiendo que tus soles son mis soles

y el cansancio que te invade

por el camino recorrido

se traslade a mí también.

 

Quiero caminar pisando

cada una de tus huellas

y al recorrer tus caminos

sentir en mi tu dolor,

tus alegrías, tus tristezas

tus nostalgias, tus anhelos

tus ansias, tu desamor…

 

Quiero que mi corazón

sienta como late el tuyo,

que los dos formen un nudo

indisoluble y perfecto…

Y yo gritar muy contento…

Soy el dueño de su amor…

 

Quiero sentir en mis ojos

el llanto que te acongoja

y hacer míos tus enojos

y así curártelos yo.

Quiero que cualquier dolor

que te hiera o te lastime

lo sienta mi corazón.

 

Quiero hacer mío también tus cantos,

tus risas, tus nostalgias y tu amor.

Quiero sumergirme en tu cuerpo

y hacer mío tus sufrimientos,

tus llantos y tus lamentos.

 

Quiero que tus huellas sean mis huellas,

que tu canto sea mi canto,

que tu risa y tus tristezas

sea la fuente de mi amor.

 

Quiero que seas el perfume

que se esparce por mi cuerpo.

Quiero que seas el secreto

que guardo en mi pensamiento.

 

 

Poeta de ilusiones

Un poeta es un enamorado que canta,

un solitario que llora,

es un alma solitaria que sueña con la esperanza,

es un soñador de mundos que hace versos,

es un ave que vuela a donde no llegan las demás almas.

 

Un poeta, es una canción que nos alegra con sus tonadas,

es una locura en algunas madrugadas,

es una carcajada,

a veces es el silencio que se esconde en el recoveco

de la nada,

es quien crea mundos paralelos entre el corazón y el alma

y solo los separa, con los versos

que nacen de los manantiales cristalinos

del alma.

 

Un Poeta,

es ese solitario que ignora la soledad y la nostalgia,

eres poeta un soñador de ilusiones,

creador de mundos fantásticos,

poeta que llora y canta

por el amor que lo hiere,

por el amor que lo mata.

Poeta que sustraes tus recuerdos, que llevas en las alforjas del alma,

¿cómo haces para cambiar el tiempo?,

un hecho pasado

hacerme creer que es una esperanza,

dime poeta

¿cómo hago para quererla en el tiempo que viene

si solo quiero olvidarla?,

porque llevo una herida en mi alma

enséñame poeta,

¿cómo puedo amarla con un verso

y olvidarla con una carcajada?

 

 

Si vendo mi carga e leña

Óigame compa’e Alfonso,

pa’onde va, con esa carga e leña,

mire que hoy es Navidá

y to’ el mundo festeja.

 

Voy a la ciudá compa’e,

pa’ vé si le compro un vestío pa’ la negra,

una muñeca a la nena

y un juguete pa’ el niño,

pa’que juegue en noche buena.

 

Es que uno en Navidá,

nunca tiene noche buena,

si vendo la carga e leña,

yo les voy a festejá

a mis hijos y a mi negra,

Navidá y noche buena.

 

Si vendo la carga e leña,

le compro un cintillo rojo

pa’ que lo luzca mi negra,

en su linda cabellera,

esta noche, en noche buena.

 

Y pa’ la nena compraré,

una muñeca morena

y un vestío de mil colores,

pa’ que lo luzca en la fiesta,

esta noche, en noche buena.

 

Si vendo la carga e leña,

también le compro a mi niño,

un pantaloncito corto

y camisa e charretela,

pa’ que se vea bien bonito,

en la fiesta, en noche buena.

 

Dicen que allá en la ciudá,

los ricos, botan la ropa vieja

y el pobre al recogerla,

se le parece a ropa nueva

y que uno se ve bonito, cuando ya la tiene puesta.

 

Si vendo la carga e leña,

yo le regalo a mi negra,

una cajita de perlas

aunque sea de fantasía,

pa’ que brillen como el día,

con luces de mil colores,

esas son mis intenciones,

en noches de Navidá,

que yo le pueda llevá,

alegría, a mis a mis amores.

 

Si vendo la carga e leña,

es difícil que me alcance,

pá comprá to’ lo regalos,

que yo quiero regalá,

a to’ los niños pobres,

que hay metío por estos lares,

donde no los mira nadie

y nunca han tenío un regalo,

ni un trapito pá estrená

y no llega Navidá, ni regalo pa’ estos niños,

tan olvidaos del mundo

y ojalá pueda encontrá

un alma, que tenga amor y cariño,

que me ayude a festejá,

noche buena y Navidá,

con una cena decente

como festeja la gente,

de los pueblo y la ciudá.

 

Si vendo mi carga e leña,

yo me la voy a gastá,

con los niños invisibles,

que nunca han tenío regalo,

ni ha tenío una Navidá.

 

 

Señora Colombia

Dígame señora Colombia, ¿por qué derrama su llanto?,

tienes unos hijos hermosos, diferentes y estudiosos,

dígame señora Colombia, ¿qué la mortifica tanto?,

sus regiones son hermosas y sus ríos tan caudalosos.

 

Dígame señora Colombia la causa de sus pesares,

si usted tiene el privilegio de tener todos los climas,

montañas, valles, llanuras, desiertos y costas en los dos mares,

disfruta de grandes ríos,

¿por qué su alegría declina?

 

Le voy a contar mi historia del porqué lloran mis tristezas,

tengo un lindo territorio, es bendición del creador,

he tenido tantos hijos, los he criado con nobleza

y a pesar de las diferencias debe imperar el amor.

 

Pero también tuve dos hijas, hermosas como estas tierras,

con cuerpos esculturales con fuego en sus caderas y lindos ojos de reinas

María paz, es la primera, alegre, linda y risueña,

es como una primavera que hace florecer la tierra,

todo el que la ve la quiere y aspira a vivir con ella

porque a todo el mundo quiere, ya que es justa, noble y buena.

 

También esta María Violencia, envidiosa y traicionera,

con unos ojos de fuego que enamoran y enloquecen

y como bejuco en la selva, ella envuelve a cualquiera

con su sonrisa y caderas, caen como mosca en sus redes.

 

La ambición la tiene ciega, baña con sangre mi tierra

y secuestró a María paz con legislación engañosa,

se apoderó del gobierno, manda en todas las esferas,

nadie le hace oposición, es violenta y peligrosa.

 

Soy la Colombia que grita con estas venas heridas

que sangre van derramando por los ríos y los nevados

en cañones, montañas en la selva, en los llanos

y llora porque violencia va matando a sus hermanos

y sus bienes va robando con el código en la mano,

con la cruz y con la Biblia aliena su voluntad,

haciendo que la maldad sea la dueña de sus vidas.

 

Ya juegan con la justicia, al inocente castigan,

el culpable en libertad como a Jesucristo y Barrabás,

dinero compra conciencias, jueces y hasta fiscal

y las leyes del congreso se hacen a la medida

para aliviarle la vida al que detenta el poder,

al rico y al poderoso los delitos no investigan.

Y este contubernio del delito y la justicia,

el ciudadano de a pie nunca puede denunciar

porque se le castigará la osadía por acusar

a las personas de bien que con el gobierno están.

 

Se hizo un acuerdo de paz, bajaron las agresiones

y hasta en los hospitales se vio la tranquilidad,

los campos fueron más verdes, se respiraba la paz,

con el cambio de gobierno se hizo triza la paz,

desplazados por montones llenos en el hospital,

masacres, desapariciones, muerte de líder social

y mi señora Colombia los muertos volvió a llorar.

 

¿Me preguntas por qué lloro?, ¿por qué mi corazón sangra?,

porque entre hermanos se matan por unas minas de oro,

por la tenencia del suelo, por el dominio del agua,

por el carbón, por el níquel, por el poder del gobierno,

por el poder de las armas, por robarse el presupuesto

que viene de los impuestos que la gente pobre paga,

por eso matan mis hijos los que ostentan el poder,

los que imparten la justicia absolviendo al delincuente

y castiga al inocente producto de la injusticia

de esta inequidad que mata.

 

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6 comentarios en «Señora Colombia»

    1. Gracias amigo Francisco, por estar en mi humilde rincon del pensamiento, gracias por dejar sus impresiones y por su tiempo, mis respetos para usted.

  1. Excelente poemas Ignacio, muy autóctono, la carga e leña, precioso, una remembranza de la realidad del país y señora Colombia un ruego porla paz. Felicitaciones poeta, excelentes poemas.

    1. Gracias mi querida Yaleidis, un placer inmenso conocerte y saludarte, darte las gracias por tu tiempo y por tu visita, por tus cálidas palabras que hacen alegrar mi alma

  2. Ignacio, usted lo dice: eres el poeta que con sus versos nos pinta a la Señora Colombia que amamos pero María Violencia, la oveja negra nos quita la Noche buena y Navidá que todos desearíamos. Gracias por compartir.

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