Saltar al contenido

¿QUÉ TIPO DE ESCRITOR ES USTED?

Joel Peñuela

Un amigo me preguntó hace poco cuál era mi meta como escritor; aunque no me lo dijo, estaba preocupado de que mi nuevo periplo, esta vez en el mundillo literario, resultara ser una prueba irrefutable de un precoz ataque de demencia senil. Le contesté: «¡El Nobel!, ¡por supuesto!». Él se rio nervioso, pero se tranquilizó cuando constató que bromeaba. Al marcharse de mi casa me puse a pensar en qué tipo de escritor soy. Comparto el resultado de mis elucubraciones.

Los genios: estos son quienes ganan premios, incluido el Nobel. Nacen para eso y se dan cuenta de ello cuando han leído cientos de libros y a todos les encuentran un «algo que les sobra», o «un algo que les falta», pero no se desgastan en críticas ácidas, más bien ensayan nuevos caminos en busca de cubrir las falencias. Cuando lo logran, los demás concuerdan en que la literatura es mejor con ellos. Algunas veces no encuentran la acogida debida entre sus contemporáneos y son rechazados, sin embargo, al fallecer, sus letras alzan la voz exigiendo mejor ponderación, hasta poner a su autor en el lugar correspondiente; es allí cuando reciben el reconocimiento, aunque póstumo.

Los exploradores: No alcanzan a ser como los primeros, pero marcan el paso muy de cerca. Logran ponerse por encima de su generación, porque tienen la disciplina de los anteriores, pero no su talento, o más bien su talante. Les falta poco, sin embargo, la naturaleza o el destino se ha jurado impedirles formar parte del séquito anterior. Es como si su gen escritor hubiera tropezado o peleado con el resto de eslabones de la cadena. Estos, por decirlo de alguna manera, son genios, no obstante, sin esa lámpara que cumple los deseos.

Los gladiadores: Aquí está la mayoría. Reconocen la importancia de escribir bien. Conocen las reglas que controlan el arte: gramática, ortografía, redacción, estilo… son los tecnócratas del libro. Siempre tienen una recomendación para el colega y encuentran una forma de mejorar los textos ajenos. Se congregan en pequeñas colectividades con la intención, dicen, de ayudarse unos a otros, pero algunas veces es solo para aplaudirse entre ellos. La característica más sobresaliente de esta cofradía es la capacidad de ensoñarse y la constante búsqueda de aprobación. Los más sinceros, buscan expresarse y ser escuchados, y tal vez, encontrar su propio tono en medio de la cacofonía producida por la algarabía y los susurros insípidos de quienes nadan en las aguas de la mera verborrea.

Entre los gladiadores están algunos con el alma ajada. Saben que no llegarán muy lejos por el sendero de las letras y se dedican a estorbar el avance de los otros, se especializan en criticar y destrozar los demás textos, tratando de poner lindero a su propio feudo. Unos pocos, los del alma grande, se resignan, sin buscar explicaciones ni culpables, y convierten el viaje en aventura. Aprenden a reírse de todo, en especial de ellos mismos, y son felices.

Los despistados: Estos cierran el círculo, son quienes producen pena ajena. Sus mayores lecturas son las redes sociales, los memes y las caricaturas o dibujitos con un pie de página lleno de gazapos. Uno u otro de ellos cree haber llegado al clímax de su esfuerzo porque a vuelo de pájaro ha leído algún clásico, si acaso, como tarea en la escuela básica, pero están convencidos de hacer literatura porque ponen en letras sus sentimientos, como si emocionarse fuera un arte. Estos son los que cuando les dices que escribieron mal una palabra, contestan: «Hasta Gabo tenía mala ortografía; lo importante es espresarse».

Mientas escribo esto, no puedo dejar de pensar que, si usted es como yo, se estará preguntando: «¿y dónde creerá él estar ubicado en el ecosistema literario?». En ninguno de los extremos: ni genio ni despistado, y para evitar suspicacias, descarto a los segundos. Pues bien, compañero de travesuras, lo más probable es que usted y yo formemos parte de la mayoría, lo cual resulta siempre cómodo, pues entonces podemos abrazarnos y decirnos uno al otro: ¡Bienvenido, gladiador, a la arena de este circo!

1 estrella2 estrellas3 estrellas4 estrellas5 estrellas (Ninguna valoración todavía)
Cargando...

4 comentarios en «¿Qué tipo de escritor es usted?»

  1. No me considero escritor, por eso no hago parte de ninguna de tus definiciones, pero al leerte me doy cuenta que has acertado en el blanco, sobre todo en la de los gladiadores, es un gremio de temer, sobre todo cuando forman su aquelarre para aplaudirse entre ellos.

Déjanos tu comentario