Nostalgia anticipada de tu ausencia
Tu partida dejó un espacio, al principio parecía insondable, una grieta en mi mundo, una herida que tenía mucho antes de la herida. Poco a poco la herida se convirtió en cicatriz, en olvido…
Tu partida dejó un espacio, al principio parecía insondable, una grieta en mi mundo, una herida que tenía mucho antes de la herida. Poco a poco la herida se convirtió en cicatriz, en olvido…
De repente todo cambió, la luz se hizo oscuridad, la vida se apagó, los sueños se hicieron pesadillas, las ilusiones fueron aplastadas y los planes quedaron en nada.
No te pido eternidad, ni que me tomes de la mano, me conformo que cuando estés, me mires a los ojos y sonrías y que esos cinco minutos sean eternos.
Apenas tendré unos pinceles rojos,
azules verdes y negros, siempre me faltara el amarillo de tu pelo, de los rayos del sol, del fuego. Apenas tendré una bocanada de aire en las mañanas para poder respirar el día.
El vagón de pasajeros con maletas llenas de tópicos se va, gris como cemento. Un prisma de luz ilumina mis pensamientos nublados. No puedo ir donde todo es igual para todos donde los sentimientos son mentirosos.
Tu menear de lobita refinada, me hará amar sombras de pureza impresas sobre el eco de días sin días.
EL LUGAR DE LAS COSAS Laura Altamura Belleza Por ese riachuelo de belleza perdí la cabeza, la barra de licor del cielo y esos ojos de sustancia espumosa traspasaron el orden de las cosas la comodidad del trivial, los convoyes del destino y entonces yo soplé. Soplé fuerte haciéndome espacio en la cronología de un pasado de plomo a desfigurar sus maleficios a fecundarme el futuro en el encantamiento. El lugar de las cosas Sigo la inclinación de la lluvia es la perspectiva de lavar lo malo que me mantiene los ojos abiertos. Borrar es… Leer más »El lugar de las cosas
Cómo duele verlo girar y girar en su cama porque el simple canto de un gallo lo despierta varias veces en la noche, y llora del desespero.
Entre mi ego y mis costumbres mis sueños y expectativas tu presencia derroca cualquier duda.
En tus manos llevas la tierra y la tradición, guardiana de la naturaleza, con devoción, tu voz es la melodía de la montaña y el río, eres un faro de luz en nuestro sombrío.