CONFESIONES
Tatiana Parodi
Promesas de verano
Oh, mujer,
ojalá que contigo se acabe el amor,
ojalá hayas matado mi última hambre.
Silvio Rodríguez
Te prometo un “para siempre” que dispute una batalla contra tu soledad.
Te prometo escribir versos asimétricos en tus estrías.
Te prometo un café sin azúcar a la madrugada.
Te prometo guardar silencio en la oscuridad de tus miedos.
Te prometo alterar mis dimensiones corporales
para dormir entre las fibras negras de tu cabello.
Te prometo un viaje libre de cargas.
Te prometo un ritmo lento de mis dedos para acariciar tu piel deshidratada.
Te prometo besarte la tristeza en la cornisa de tu abismo.
Te prometo un “te amo” que detenga la explosión de tu locura.
Te prometo memorizar las coordenadas de tus lunares.
Te prometo una canción que calme tu llanto.
Te prometo dejar la puerta abierta,
para cuando quieras volver.
Deseos nocturnos
Deseo esconderme en el cráter de tu ombligo.
Deseo cristalizar las huellas saladas de tus labios.
Deseo transformarme en ave, para escudriñar
por el dulce cielo de tus fantasías.
Deseo jugar a poseer el océano
y elegir anclarme en la orilla de tus utopías.
Deseo refugiarme en el abrigo de tu nube.
Deseo desayunar el manantial de tu impureza.
Confesiones
En el lienzo prohibido de tus heridas,
anhelo colorear una galaxia con acuarelas.
En tu mirada perdida,
anhelo alimentar mis demencias.
En tu cuerpo como trinchera,
anhelo reposar mis penas.
Soy una legítima heredera del realismo mágico. Estoy comprometida con la ficción y el helado de limón granizado. Me considero la lluvia que inspira un verso, un café amargo por la mañana y una hoguera en el infierno, por esto, escribir endulza los puntos finales y me ofrece silencio en la tormenta.
Promesa de verano me gustó mucho más por saber expresar un amor limpio y desinteresado ❤️❤️❤️❤️